Con hematomas y quemaduras en todo el cuerpo, el pulso lento, desgarre en sus genitales y con dificultades para respirar ingresó una niña de tres años a la emergencia del Hospital Universitario JM Casal Ramos, en el municipio Ospino de Portuguesa, y tras 24 horas de agonía falleció. La Policía informó que su madre y su padrastro la torturaron y la violaron durante una ceremonia satánica.

La progenitora de la niña, Yusmary Josefina Mendoza (20), y su pareja esperaron a que la pequeña cumpliera los tres años de edad el pasado 1 de febrero para prepararla para el ritual que duraría dos días. El pasado miércoles en la tarde comenzó su pesadilla, la encerraron en una habitación de una tienda esotérica propiedad del padrastro, allí la cortaron con hojillas, le quemaron varias partes de su cuerpo, la golpearon y la ultrajaron, informó el diario El Regional de Portuguesa en su página web.

Mendoza al ver que la niña casi no respiraba ideó con su pareja una coartada para librarse de responsabilidades. Le pasó por encina un caucho de motocicleta a su hijita, la envolvió en una sábana y la llevó al centro asistencial. En la emergencia aseguró que un motorizado la había arrollado. Los médicos al ver las condiciones de la pequeña notificaron a la Policía, al verse acorralada su madre confesó el crimen y delató a su marido.

Una comisión de la Policía se trasladó al lugar, recolectó las evidencias, pero no halló al sospechoso. Los vecinos les indicaron que lo habían visto salir con una maleta pocos después que su mujer saliera con su hijastra.

La condición de la niña empeoró. Los médicos decidieron remitirla al hospital de Araure. En el camino, la ambulancia donde viajaba tuvo un accidente vial, lo que complicó su estado de salud. A las pocas horas de ingresar al otro centro de salud falleció.

A las afuera de la emergencia el padre de la niña, José Antonio Ramírez Márquez, aseguró que ya veía venir este desenlace. En ocho oportunidades tuvo que denunciar a su mujer por maltratos ante el Consejo de Protección de Niñas, Niñas y Adolescentes. "Lamentablemente la mataron antes de que me otorgaran su custodia".