hepatitis C
© Shutterstock - U OxfordEl consumo de drogas: el hombre con una cuchara y una jeringa
Un prolongado estudio que incluyó diversos países demostró por primera vez que los consumidores de drogas por vía intravenosa son los grandes propagadores de la Hepatitis C, llegando a infectar en promedio a 20 personas con esta enfermedad.

"Por primera vez se demuestra que la super-propagación de la hepatitis C es liderada por los consumidores de drogas por vía intravenosa, al principio de su infección, dijo el doctor Gkikas Magiorkinis del departamento de Zoología de Oxford, en su informe publicado este viernes.

Ellos observaron además que la mitad de éstos contagios se producen en los dos primeros años de contraer la enfermedad, señala el estudio, compuesto por científicos de la Universidad de Oxford, la Universidad de Atenas y el Imperial College.

"La elaboración de cuántas personas son susceptibles de ser infectados por cada 'super-esparcidor' de la hepatitis C, así como la rapidez con que se infectaba, había sido un misterio durante más de 20 años", dijo el Dr. Magiorkinis.

El Dr. Magiorkinis y los científicos del estudio hicieron un llamado advirtiendo que hay que "limitar esta programación", destacando que estos "super propagadores" ya causaron unas180 millones de personas enfermas.

El equipo de especialistas espera que su informe se utilice como evidencia para un plan de diagnóstico precoz dirigido especialmente a los usuarios de drogas, a los que se emplee el respectivo tratamiento antiviral.

"Nuestro objetivo final es ayudar a estas personas y detener la propagación de la hepatitis C", señala el equipo.

Muchas de las millones de personas en el mundo que viven con el virus de Hepatitis C no saben que fueron infectadas, y permanecen sin diagnóstico por unos 10 años, señalan los científicos.

Tras el estudio se detectó a su vez que un 20% de ellos después de unos 20 años de infectados desarrollan un cáncer de hígado, o una cicatrización llamada cirrosis, cuyo único tratamiento para evitar la muerte es el trasplante, que cuesta cerca de 100.000 dólares por paciente o más.

Aunque no hay vacuna para este tipo de hepatitis los tratamientos que existen son muy eficaces si se da a tiempo.

El virus se transmite principalmente a través de la sangre contaminada. Los médicos de Oxford recuerdan que antes de 1990 otra vía de transmisión importante fue la transfusión de la sangre y los productos sanguíneos.

Sin embargo, desde el descubrimiento del virus en 1989, la detección de éste en las transfusiones de sangre dejó como única vía de transmisión significativa de la hepatitis C, el uso de drogas intravenosas, donde los usuarios están en riesgo mediante el intercambio y la reutilización de jeringas.

"Nuestra investigación ha resuelto este problema y prepara el camino para un estudio de modelación para mostrar qué tipo de intervenciones de salud pública podrían realmente hacer alguna diferencia".

"Nuestro enfoque también debe ser muy útil para aquellos que estudian el VIH".