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© Herschel-ESAAmpliar foto
Ültimas imágenes del Observatorio Herschel de ESA muestran un gran muro más allá de los arcos provocados por el movimiento de la gran estrella gigante roja Betelgeuse en la Constelación de Orión
La estrella gigante roja Betelgeuse de la Constelación Orión, una de las más vecinas a la Tierra "podría entrar en colisión con un intrigante muro de polvo en 5000 años, informó ayer la Estación Espacial Europea (ESA).

Reveladoras imágenes del Observatorio Espacial Herschel de ESA, muestran una serie de arcos en torno a la estrella y un muro detrás de ellos.

Betelgeuse se observa en el cielo nocturno a simple vista de un color rojo naranjo a uno de los lados del famoso cinturón de Orión, y en la parte que correspondería al hombro del cazador.

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© ESOEstrella Betelgeuse de Orión en imagen del telescopio Very Large de ESO en 2009
Esta se ve por el lado contrario de la luminosa estrella Rigel. Las estrellas del cinturón, que algunos llaman comúnmente "Las tres marías", están entre estas dos.

La gigante roja es 1000 veces más grande que el Sol y 100.000 veces más luminosa y según ESA es posible que su destino termine en una gran explosión llamada por los astrónomos como Supernova, que se produce cuando las estrellas crecen de tamaño y se transforman y pierden una parte importante de sus capas exteriores.

La imagen de Herschel revela las ondas de choque que se forman a medida que la estrella se mueve a una velocidad de 30 kilómetros por segundo.

"La serie de arcos rotos y polvorientos en la dirección del movimiento de la estrella nos hablan de una turbulenta historia de pérdida de masa", señala ESA.

Cerca de la estrella hay una serie de glóbulos y grumosos restos de polvo que podrían corresponder a eyecciones de material en diferentes etapas del pasado.

La "fascinante estructura lineal" que se observa tras los arcos de polvo más allá de la estrella aún no se determina con certeza qué es.

Los astrónomos creen que puede ser un material concentrado ahí, tras haber sido expulsado en etapas anteriores.

Otra opción propuesta, es que sea un filamento lineal ligado al campo magnético de la galaxia o bien el borde de una nube interestelar cercana iluminada por la estrella.

Los astrónomos de ESA aseguran que si la barra tiene un movimiento independiente a la estrella, en 5000 años, ésta chocará con los arcos anteriores de Betelgeuse, y en 12500 años con la estrella misma.